"Motero un dia, motero toda la vida". Una frase que encontré escrita en algún lugar y a la que no le habia hayado el sentido que merece, hasta que rodé por primera vez en "Tomate" (nombre cariñoso dado a mi primera motocicleta) una scooter de 150 cc que me acompaño por 2 años y en la que pude experimentar esa sensacion indescriptible de libertad, independencia y autonomia.
Lo que comenzó siendo una necesidad por mejorar mi movilidad dentro de una ciudad con un tráfico cada vez más caotico, terminó siendo una pasión que se alimenta dia a dia abordo de mi inseparable "Suzie" (nombre cariñoso de mi actual motocicleta y con la cual ya llevo un año).
No importa tu estado de ánimo, no importa si hace sol o llueve a cantaros, no interesa si te embarras o la pasas intacto, si te pinchas, si te sopla el viento o te internas en una densa nube de neblina, ella siempre esta ahi para recordarte que sólo cuando aprecias las cosas más simples es cuando le encuentras "pasión" a la vida misma.
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